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COOPER
Actipoche
Spray frío
Calma temporalmente el dolor
Traumatismos, golpes y contusiones
400ml
El Spray Frío ACTIPOCHE proporciona un rápido alivio del dolor gracias a su acción de frío instantáneo (crioterapia), especialmente en el caso de lesiones deportivas (golpes, distensiones, esguinces, torceduras).
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La lista de ingredientes puede variar. Se recomienda verificar siempre la lista que figura en el producto adquirido.
Composición: Mezcla de n-Butano, Propano, Isobutano (propulsor), Alcohol desnaturalizado, Perfume.
No utilizar el producto para ningún otro fin que no sea el previsto.
Uso externo.
No aplicar sobre la piel irritada o lesionada.
No rociar sobre o cerca de la cabeza. Evitar la cara, los oídos y los ojos. No pulverizar sobre las mucosas.
No utilizar durante el embarazo o en periodo de lactancia.
No apto para niños menores de 6 años.
No apto para personas que sufren el síndrome de Raynaud, intolerancia al frío, trastorno nervioso periférico o trastorno de sensibilidad al frío.
Evitar el contacto con los ojos. En caso de contacto con los ojos: aclarar cuidadosamente con agua durante varios minutos. Si persiste la irritación de los ojos: consultar al médico.
En caso de ingestión: llamar inmediatamente a un centro de toxicología o a un médico.
Aerosol extremadamente inflamable.
Recipiente presurizado: puede reventar con el calor.
Mantener alejado del calor, de superficies calientes, de chispas, de llamas abiertas y de otras fuentes de ignición.
No pulverizar sobre una llama abierta o cualquier otra fuente de ignición.
No perforar ni quemar, incluso después de su uso.
No respirar los aerosoles.
Utilizar sólo en el exterior o en una zona bien ventilada.
Proteger de la luz solar. No exponer a temperaturas superiores a 50°C/122°F.
Mantener fuera del alcance de los niños.
Para ser utilizado como tratamiento de primera línea, antes del tratamiento del edema.
Pulverizar directamente sobre la piel desde una distancia mínima de 20 cm durante 10 segundos. Barre la zona dolorida para evitar cualquier riesgo de congelación. Repita la operación si es necesario.
Utilizar ráfagas cortas de presión, sin pulverizaciones prolongadas. Dejar de pulverizar en cuanto aparezca la escarcha.
En el caso de niños a partir de 6 años: utilizar bajo la supervisión de un adulto.
