Bachca Brocha biselada para colorete

Basta con coger una pequeña cantidad de colorete de la punta de la brocha y aplicarla directamente sobre las mejillas. Difumina tanto como necesites, extendiéndolo hacia las sienes. Para lavarla, sumerge el cabezal de la brocha en agua y, a continuación, aplica un poco de jabón (o champú suave) en la palma de la mano. Frota el cepillo en la mano con pequeños movimientos circulares y aclara. Repite la operación hasta que el cepillo desprenda agua clara. Escurre todo lo que puedas con los dedos, sin arrancar las cerdas. Extiende una toalla de rizo pequeña o una capa gruesa de papel de cocina sobre una superficie plana y coloca los pinceles uno al lado del otro. No los seques boca abajo.