Dosis y vía de administración: Sólo para uso externo. Uso en piel.
Un collar por perro para colocar en el cuello.
Sacar el collar de la bolsa de embalaje justo antes de utilizarlo.
Ajustar el collar alrededor del cuello del animal de manera que no quede ni demasiado suelto ni demasiado apretado: deben poder pasar dos dedos de lado entre el collar y el cuello del perro.
Cortar cualquier exceso de más de 5cm después de la hebilla.
Comprobar regularmente y ajustar el collar simplemente presionando en la parte superior de la hebilla, y luego deslizar el collar en la posición adecuada.
Sobredosis: En caso de ingestión accidental del collar, pueden aparecer los siguientes síntomas: ataxia, temblores, hipersalivación, vómitos, rigidez de los cuartos traseros.
Estos síntomas suelen desaparecer en 48 horas.
Para obtener más información sobre el tratamiento sintomático, es aconsejable ponerse en contacto con su veterinario.
Dado que el collar alcanza su nivel óptimo de eficacia al cabo de una semana, es preferible aplicarlo una semana antes de que el animal pueda estar expuesto a una infestación parasitaria. Por regla general, las garrapatas y los flebótomos mueren y se desprenden del huésped en las 48 y 24 horas siguientes a la exposición, respectivamente, sin alimentarse de sangre. No se puede excluir la adhesión de una garrapata aislada o la picadura de un flebótomo aislado después del tratamiento. Por lo tanto, no se puede excluir completamente la transmisión de enfermedades infecciosas por parte de las garrapatas o los flebótomos en condiciones desfavorables. Para tratar de forma óptima las infestaciones por pulgas en un hogar con varios animales, todos los perros del hogar deben ser tratados al mismo tiempo. Las pulgas de los animales domésticos suelen infestar sus cestas, zonas de descanso y lugares habituales de reposo, como alfombras y tapicerías. En caso de infestaciones masivas, y tan pronto como se inicien las medidas de control de plagas, estas áreas deben ser aspiradas regularmente y tratadas con un insecticida adecuado.
En caso de lesiones cutáneas, retire el collarín hasta que desaparezcan los síntomas. No se ha estudiado la influencia del champú en la duración de la eficacia. El contacto ocasional con el agua no reduce la eficacia del collar.
Precauciones especiales para la persona que administra el medicamento veterinario a los animales: La ingestión accidental de este producto puede causar efectos adversos, incluyendo neurotoxicidad. Conserve el producto en su embalaje original. Sujetar el collar en la bolsa hasta su uso. No fumar, ni beber, ni comer mientras manipula el collar. No dejar que los niños jueguen con el collar ni se lo lleven a la boca. Desechar inmediatamente cualquier parte sobrante o cortada del collar. Lavarse las manos con agua fría después de ponerle el collar a su mascota. Evitar el contacto prolongado con el collar o con el perro que lo lleva. Esto incluye compartir la cama con perros con collar: esto es especialmente importante para los niños. En caso de exposición oral o ingestión accidental, acuda inmediatamente al médico y muéstrele el prospecto o la etiqueta. La deltametrina puede provocar reacciones de hipersensibilidad (alergia) en individuos susceptibles. Las personas con hipersensibilidad conocida a la deltametrina deben evitar el contacto con el medicamento veterinario y el animal tratado. Si se producen reacciones de hipersensibilidad, consulte a un médico.
Otras precauciones: La deltametrina es tóxica para los organismos acuáticos.
Los perros que lleven el collar no podrán entrar en los cursos de agua.
Efectos secundarios: En casos raros, se han observado reacciones cutáneas locales en el cuello o en la piel en general (prurito, eritema, pérdida de pelo). En casos muy raros, se han notificado alteraciones del comportamiento (por ejemplo, letargo o hiperactividad) a menudo asociadas a la irritación de la piel. En muy raras ocasiones se han observado síntomas gastrointestinales como vómitos, diarrea e hipersalivación. En casos muy raros, se han observado trastornos neuromusculares como ataxia y temblores musculares. Estos síntomas suelen desaparecer en las 48 horas siguientes a la retirada del collarín. Si se produce alguno de estos síntomas, debe retirarse el collar y ponerse en contacto con un veterinario.
La frecuencia de las reacciones adversas se define como sigue:
Muy común (reacciones adversas en más de 1 de cada 10 animales tratados),
Común (entre 1 y 10 animales de cada 100 animales tratados),
Poco común (entre 1 y 10 animales de cada 1.000 animales tratados),
Raro (entre 1 y 10 animales de cada 10.000 animales tratados),
Muy raro (menos de 1 de cada 10.000 animales tratados, incluyendo casos aislados).
Uso durante el embarazo, la lactancia: Los estudios de laboratorio no han demostrado ningún efecto teratogénico o embriotóxico. No se ha establecido la seguridad del medicamento veterinario en perras embarazadas. Por lo tanto, el uso del fármaco durante la gestación o la lactancia sólo debe realizarse tras la evaluación de la relación beneficio/riesgo por parte del veterinario responsable.
Interacciones medicamentosas y otras formas de interacción: No utilizar con otros antiparasitarios externos (piretroides, organofosforados).
